El lunes 13 de mayo de 1647 Chile fue golpeado por un terremoto con una magnitud de 8.5 grados, que dejó más de 600 personas fallecidas. Si bien este hecho se recuerda con tristeza, también conmemora la labor realizada por todos los ingenieros que, al día siguiente, pusieron a disposición sus conocimientos y habilidades para apoyar las labores de remoción de escombros y reconstrucción.  

Fue a partir de este hito que en 2009, se declaró el 14 de mayo como el Día Nacional del Ingeniero/a o también Día Nacional de la Ingeniería. 

A lo largo de nuestra historia la Ingeniería ha protagonizado muchos de los principales hitos vividos por la humanidad, como la creación de la máquina a vapor (1712), el lanzamiento del primer satélite artificial (1957), el teléfono celular (1973) y el Internet (1983) que en los últimos años ha jugado un rol clave para enfrentar la Pandemia causada por el COVID-19 permitiéndonos seguir conectados y realizando todo tipo de actividades desde nuestros hogares. 

Actualmente, esta disciplina enfrenta nuevos desafíos, algunos de ellos críticos para la vida de las personas como es el Cambio Climático, un fenómeno que nos hace recordar los efectos del terremoto que dio origen a esta conmemoración y que una vez más requerirá de todo el ingenio para lograr mitigar sus efectos por medio del uso de la ciencia y la tecnología. 

La Ingeniería también vive una época de cambios donde la equidad de género juega un rol fundamental con mujeres empoderadas que exigen dejar de ser relegadas a un segundo lugar en esta disciplina y dispongan de espacios donde se puedan desarrollar en igualdad de condiciones que los hombres.

En ambos escenarios la academia juega un rol clave. Por una parte, investigadores en universidades de todo el mundo trabajan por encontrar soluciones tecnológicas que nos permitan reducir los efectos del Cambio Climático y también es el punto de partida para generar un espacio equitativo donde se forman a las ingenieras de clase mundial del futuro. 

En las facultades de Ingeniería y Ciencias de la Construcción y Ordenamiento Territorial de la UTEM se abordan ambos desafíos con iniciativas e investigaciones prometedoras que afrontan la problemática ambiental, al mismo tiempo que se desarrollan programas para promover la participación femenina en sus carreras de Ingeniería Civil. 

Para el Decano de la Facultad de Ingeniería, Alejandro Velásquez, “nuestro principal objetivo al 2030 es que haya ingenieras e ingenieros con una visión distinta de la profesión que tenemos hoy y que apunta a una profesión globalizada con las mismas expectativas para hombres y mujeres, junto con ser respetuosa con el medio ambiente y ayude a aminorar los impactos del cambio climático”.

Es así que en 2018, las facultades de Ingeniería y Ciencias de la Construcción y Ordenamiento Territorial UTEM iniciaron el proyecto Ingeniería 2030 a fin de transformar las carreras de ingeniería teniendo como horizonte aportar al mejoramiento de la productividad y competitividad nacional, creando valor a partir del avance del conocimiento, con una mirada multidisciplinaria, aumentando significativamente la transferencia tecnológica de alto impacto; la generación de servicios de calidad y la formación de profesionales partícipes del entorno innovador, todo lo anterior, cimentado en una fuerte vinculación con la industria nacional e internacional para avanzar en la transformación productiva del país a través de emprendimientos de base científico tecnológica.

Para el Decano Velásquez este último punto resulta igual de clave que los dos anteriores señalando que “nuestros estudiantes deben llevar el gen del emprendimiento y la innovación con foco en la responsabilidad social. Hoy nuestros estudiantes son generadores de actividad económica, capaces de colaborar en un mundo globalizado y en ese ámbito el saber innovar es clave”. 

En esta línea el Proyecto Ingeniería 2030 UTEM juega un rol fundamental. Como señala la Jefa INGENIERÍA 2030 UTEM, Marcela Letelier, “por medio de su Estrategia de Género, el proyecto busca potenciar la participación femenina en las carreras de ingeniería civil, al mismo tiempo que genera acciones que promueven la equidad de género dentro de la Universidad.

Este año en que se conmemora un nuevo aniversario del “Día Nacional de la Ingeniería”, el recuerdo de los ingenieros que pusieron todo su ingenio para afrontar el desastre de ese terremoto está más vivo que nunca, con desafíos de nivel global que requieren ingenieros de categoría mundial y la UTEM se está preparando para afrontar esos desafíos.